¿Qué es la sabiduría según la Biblia?

¿Es posible entender la sabiduría de Dios? Sí es posible y para ello está la Biblia, donde está contenida, en sus versículos las claves y secretos para que las personas sean sabios.

Ya hemos visto que la sabiduría es la capacidad de usar conocimientos y aplicarlos para la solución de problemas. Ahora veremos qué dice Dios sobre este interesante tema.

Dios y la sabiduría

La Biblia es enfática: la sabiduría es un atributo de Dios, es decir; forma parte de su naturaleza y el hombre puede acceder a ella teniendo una relación cercana con Él.

Así, en el libro de Proverbios (1:7) encontramos la siguiente afirmación:

«El principio de la sabiduría es el temor de Jehová; los insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanza».

Lo cual es bastante sencillo de comprender: sigue los principios de Dios, contenidos en la Biblia y ya estás en el camino de la sabiduría. ¿Quiere decir esto que la Biblia excluye lo que dicen otras religiones o sistemas filosóficos que rechazan o ponen a Dios en segundo plano? Sí y la razón es asombrosa.

Dios es el ser increado, sin fin ni principio; fuera del tiempo. De Él viene todo, es creador de las cosas que existen, tenga o no el ser humano conciencia de ellas, tal como vemos en Genesis.

De manera que su naturaleza creativa implica también su dimensión moral y ética; pues toda creación tiene un propósito útil y bueno, aunque así no lo parezca. Por ejemplo, las serpientes venenosas, aunque pensemos que son animales terribles; recientes investigaciones han demostrado que el veneno contiene el secreto para curar males en la estructura nerviosa: desde parálisis hasta mal de Parkinson ahora podrán curarse.

¿Cómo ayuda la sabiduría de Dios?

Entonces, de la mano del conocimiento infinito contenido en la Biblia, sumado a una práctica constante de estudiar las escrituras, se llega a adquirir la sabiduría de Dios. ¡Es bastante sencillo!

Ahora, si te preguntas, para qué te sirve tal sabiduría, la Biblia también te responde, en el mismo libro de Proverbios (1:2-6):

«Para entender sabiduría y doctrina, para conocer razones prudentes, para recibir el consejo de prudencia, justicia, juicio y equidad; para dar sagacidad a los simples, y a los jóvenes inteligencia y cordura. Oirá el sabio, y aumentará el saber, y el entendido adquirirá consejo, para entender proverbio y declaración, palabras de sabios, y sus dichos profundos.»

Así, que la sabiduría es un conocimiento práctico alcanzable para todos (porque los simples pueden ser sagaces y los entendidos adquirir consejo) y que sirve para resolver muchos problemas, como vencer la ignorancia, saber cómo decidir en una situación dada y qué pensar cuando alguien te dice algo.

¿No son estas habilidades valiosas en el mundo actual?

¿Cómo alcanzar la sabiduría de Dios?

«Ut innotescat multiformis sapientia Dei» ¿Haz escuchado este lema, usado por instituciones prestigiosas como la Universidad Católica Andrés Bello? Bien, proviene de la Biblia y está en el libro de Efesios, capítulo 3, versículo 10. Dice así:

«Para que la multiforme sabiduría de Dios sea ahora dada a conocer por medio de la iglesia a los principados y potestades en los lugares celestiales»

Que la sabiduría sea dada a conocer significa que tiene que ser descubierta y divulgada. Entonces debe estar en alguna parte: el mejor lugar para encontrarla es la Biblia.

Entonces, la mejor manera de alcanzar la sabiduría de Dios es leer la Biblia con sentido crítico y fe, lo que implica leer la Biblia diariamente y estudiarla en detalle.

Suena a un trabajo difícil. La verdad, es que lo es: pero ya crear la disciplina de estudio, implica un cambio en tu vida, pues estás dedicando tu tiempo a lograr algo valioso: aprender algo que transforma tu vida a alcanzar el bien y la prosperidad.

En otra entrada hablaremos de cómo podemos alcanzar la sabiduría de Dios con prácticas diarias fáciles de hacer y que no te quitarán demasiado tiempo.

 


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